En medio de la polémica reforma laboral, el presidente Gustavo Petro firmó un decreto que da paso a una consulta popular. La decisión, que fue tomada minutos después de un mensaje en redes sociales, ha generado diversas reacciones en el país.
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"He firmado el decreto que convoca a la consulta popular", expresó el presidente, enfatizando que el proceso solo será derogado si el Congreso responde positivamente a los temas planteados en la consulta. La medida fue anunciada en un momento clave: cuando en el Congreso se debate la reforma laboral, la cual ha sido un punto de fricción entre el Gobierno y el Legislativo.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, justificó la acción diciendo que solo tenían hasta la medianoche para firmar el decreto, pero también destacó que la acción buscaba abrir un espacio de diálogo con el Senado. "El presidente confía en el Senado y en los acuerdos a los que se puedan llegar", afirmó Benedetti.
Sin embargo, desde algunos sectores del Congreso, la firma del "decretazo" fue vista como una presión al Legislativo. El representante José Jaime Uscátegui y el concejal Daniel Briceño han anunciado que impulsarán acciones legales contra la medida, alegando que se trata de una violación de la Constitución.
¿Estamos ante una maniobra para forzar la reforma laboral o un intento genuino de fortalecer el diálogo entre los poderes del Estado? La respuesta sigue en el aire.
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